El tiempo se agota. González habla.

Parece que estos días la intoxicación mediática ha asfixiado a muchos de nuestros políticos. En algunos casos nos permitió ver el inoportunismo de los que confunden negociación política con "qué hay de lo mio", o el sentido de la responsabilidad e interés general con el "tú la llevas" de un patio de colegio. Una vez más pocos estuvieron a la altura, quizás y por eso lo nombro Rivera sea de los pocos que no sorprende y se mantiene en lo que sabíamos, jugar con la abstención para poder influir en una política soportada en la moderación y el interés general.

Pero hoy he decidido escribir porque ha habido un hecho fundamental, Gónzalez ha hablado. Reteniendo una "auctoritas" innegable, ha evidenciado lo que otros no quieren ver. Trataré de resumirlo en la política de bloques que se negocia desde las elecciones:

• Si apostamos por el bloque de derechas, el resto bloqueará y no será posible un gobierno.
• Si apostamos por el bloque de izquierdas quizá pueda conseguirse la investidura pero al coste de lograr el apoyo no solo del "leninismo 3.0" o "Chavismo-Comunista", sino al menos de IU y el nacionalismo vasco, partiendo de que no se opusiera el resto del nacionalismo.

Es decir son dos vías muertas, que con un poco de suerte consiguen nombrar un gobierno pero que el resto de legislatura, estarán atados de pies y manos para negociar. El reformismo sobre el sistema para que siga avanzando es necesario, para ello se precisa un consenso entre partidos que valoren al sistema y velen por el interés general. 

Ese pacto a la alemana, es el que se pide desde muchas instancias, pero teniendo en cuenta nuestra singularidad. Ese pacto sólo es posible con un gobierno PP+C'S, o bien PSOE+C'S, pero con el apoyo abstencionista de la otra fuerza en cada caso. Para que esto pase debe hablarse de políticas, reformas y cambios, buscando un planteamiento basal de estas tres fuerzas en donde exista una realidad negociadora que busque puntualmente el apoyo de otras fuerzas políticas. Después, deberían hablar sobre quién debe dirigir ese proyecto. Si me preguntan, pienso que no creo que debiera ser Rajoy. 

Sólo en esta línea podríamos establecer una nueva transición y una regeneración del sistema. No lo digo yo, creo que es esta la lectura imparcial de la entrevista a uno de los grandes políticos de nuestro siglo XX: Felipe González. 

En mi caso, sólo me permito añadir algo, si no son capaces de tal empresa, debieran repetir elecciones y buscar que los españoles decidan entre bloques, pero para esto realmente precisamos una reforma electoral de vuelta al bipartidismo, con una segunda vuelta para determinar qué partido es el mayoritario. 

Ciertamente no creo que sea el camino. el mandato de los españoles ha sido el de buscar el entendimiento entre distintas formas de ver la política, pero para eso han de estar dispuestos a la renuncia al interés personal por el general, primera lección para todo político.